La llave de la tarde
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Betta, Giulia, Riccardo y Matteo se adentran en el bosque que rodea Castelcorvo en busca de la Llave de la Tarde, que, junto con la Llave de la Mañana, ya en su poder, les permitirá llegar al Otro Lugar y salvar al hermano de Betta, preso allí de la traicionera Stria. ¿Qué están buscando? El nuevo acertijo, que Matteo resuelve, dice: «Abrirme nada cuesta, cerrarme precisa magia. De quien vuela soy la cuna y te indicaré la ruta». La respuesta es «huevo», pero ¿qué significa? Los niños se adentran cada vez más por un camino en el bosque cada vez más espeso, a oscuras, cuando está a punto de atardecer. Un camino que Betta conoce bien, pues ha ido muchas veces a buscar setas con su padre. Aunque, extrañamente, termina en un claro donde se alza un extraño edificio, un pequeño templo gótico, uno que nunca había visto. Un edificio fantasma, otra rareza de Castelcorvo, lleno de toda clase de huevos. Entre medias, Betta y Giulia encuentran un huevo de yeso con algo que suena dentro... ¿La Llave Mágica, tal vez? Matteo rompe a toda prisa el huevo contra el suelo. Sin embargo, en su interior solo hay un pergamino cerrado por un anillo de latón con una invitación para Matteo: debe adentrarse aún más en el bosque y encontrar la Llave de la Tarde él solo. El niño, el más asustadizo de todos, se adentra en la espesura del bosque. Tiene miedo y, de repente, oye una voz inhumana y profunda que le llama: es la de un árbol terrorífico con rasgos de toro. Matteo quiere huir, pero unas raíces le sostienen los tobillos. El árbol le dice que le entregará la llave a cambio de su mayor secreto. Si no, se transformará en árbol y quedará atrapado allí para siempre. Le cuesta gritarle a las hojas que siempre ha estado enamorado de Betta, pero esta confesión lo salva y le consigue la Llave de la Tarde. Vuelve orgulloso con los Caballeros y estos celebran su llegada, pero se niega a decir lo que pasó ya que le da vergüenza decírselo a Betta. Los cuatro amigos corren a volver a casa: ahora que tienen las dos llaves, podrán abrir la Puerta de la Sombra esa noche. En el camino de vuelta, Giulia queda con Zeno y se para a hablar con él. El hijo de Stria intenta hipnotizarla, pero algo lo bloquea. Aún no lo sabe, pero se está enamorando de ella y esto anula sus poderes mágicos. Giulia vuelve a casa llorando, defraudada porque el chico que creía que la quería solo buscaba las llaves. A medianoche, los Caballeros se reúnen en el ático frente a la Puerta de la Sombra y la abren. Cruzan el umbral y entran en el Otro Lugar. ¿Qué les espera allí?